Como Socialistas defendemos el derecho de todes a un ambiente sano y sin contaminación. También comprendemos la relación entre la contaminación y la salud de los habitantes del planeta, y por ello la responsabilidad política de todos los gobiernos.
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Es impostergable mudarnos a un uso racional de las energías, donde las mismas provengan de fuentes limpias y renovables, contando además con la democratización de su distribución y uso. Sumado a esto, hemos de revisar todas las políticas, incluidas las ambientales. Y entre todes, debemos repensar cómo consumimos, ya que en los actuales patrones de consumo se encuentra el peor enemigo para la humanidad y la naturaleza.